La maldad que mora en mi
- DevocionalesICBN
- 20 oct 2021
- 2 Min. de lectura

LA MALDAD QUE MORA EN MÍ
Basado en Romanos 7.
Hay una verdad que no puede ser oculta y es el reconocer que hay un mal dentro de cada uno de nosotros que nos lleva a tomar malas decisiones, y a lastimar, nos lleva a perjudicar a otros y a perjudicarnos a nosotros mismos. Esa maldad que mora en nosotros, algunas veces se hace visible, otras no.! Tremendo!, esa maldad te lleva a hacer daño y a dejar que te lo hagan. Es por eso, la importancia de buscar a Dios.
Hay cosas que hacemos y luego nos duelen, hay cosas que no pensamos bien y terminamos lastimamos a otros, sin recordar que hay una generación que también puede verse perjudicada; en este caso, los hijos. Hay daños que se manifiestan con el crecimiento, pero todo ello viene de esa misma maldad que carcome el alma.
Triste ver que muchas personas pagan por ello y se vuelve como una cadena de destrucción. ! Gracias a Dios! por Cristo Jesús, porque a través de su sacrificio recibimos perdón cada día; pero no debemos ser descuidados con ese amor y su gracia que nos levanta.
En esta hora, te invito a reflexionar, para que esa maldad sea arrancada por el Padre. Algunos pueden decir: "eso nunca va a pasar". Te puedo asegurar que del pensamiento a la acción hay un gran paso y eso busca Papá: ir trabajando para que dejemos de accionar el mal y en su lugar ayudemos a levantar a otros.
La maldad que mora en nosotros, se basa en muchas cosas, entre otras está el inconformismo, el cual nos lleva a dañar familias, a querer lo que otros tienen, haciéndonos inconformes y queriendo que otros nos vean o amen -como creemos merecerlo-, sin importarnos qué familias o personas sean destruidas. Es lamentable, ver cómo podemos hacer daño, sin fijarnos en que el tiempo pasa factura y todo el mal que hoy se siembra, querido lector te informo: que si no te arrepientes, ese mismo mal te será devuelto cobrando tu vida, salud, finanzas y familia.
Disley Sierra
Tremenda palabra para meditar.
Esa misma maldad se desarrolla cuando le damos rienda suelta a nuestros gustos personales y no a la voluntad de Dios. Cada día al despertar debemos dar y gracias e inmediato pedirle a Cristo Jesús que tome todo de nosotros; alma, mente, cuerpo y espíritu y que el amor del Padre penetre tanto que no deje levantar el viejo hombre. Bendiciones...
Así es. Q mensaje tan certero. ..para meditar
Tremendo amén, escudriña oh padre mi ❤️cada día de mi vida y saca toda maldad que en el halla.
Que un día podamos manifestar lo que ocurre en nosotros: "Es que ya no vivo yo, es Cristo quien vive en mi" ese día, entramos en victoria.
Uno de nuestros tres enemigos espirituales es LA CARNE, tal vez el más difícil de vencer, ahí es donde aplica esa máxima de nuestra seguridad en El: "Todo lo puedo en Cristo, que me fortalece".
Él es el que nos da la victoria en nosotros mismos. "En Cristo somos más que vencedores"