¡Ya está bueno!

¡YA ESTÁ BUENO!

Buenos días Iglesia. Quiero gritar ¡Ya está bueno! Basta de que se escuche el nombre de nuestros pueblos , porque ocurren cosas horrendas. Ya está bueno de tanta sangre derramada. Somos más recordados históricamente por una masacre de trabajadores en la Zona Bananera, que por la exquisitez del fruto de sus plantíos.

Fundación ,Magdalena es más recordada por el calcinamiento de muchos niños, en vez de porque es llamada “ la Esquina del Progreso”. Claro y no me refiero a una frase que alguien creó hace décadas; no, me refiero a que allí está la bendición de Dios que transforma vidas y hace prosperar como dice 3 Juan: 2,  deseo que tú seas prosperado en todas las cosas, y que tengas salud, así como prospera tu alma. Allí está la Iglesia Cristiana Buenas Nuevas( I.C.B.N)

Tengo la certeza de que volveremos a brillar por lo positivo que sucede en Fundación, con la intensidad y luminosidad con que el sol dice presente en nuestro terruño. Que Aracataca sea pronunciada porque sirvió a la inspiración del escritor literario; que en Barranquilla hubo el brote viral más agresivo de Colombia, que si la conocieron como “la Puerta de Oro”, ahora sabrán que allí está abierta la puerta para todo el que se quiera salvar.

Ya está bueno en que la violencia siga señoreándose en estas tierras, que el daño a los niños sea una carta de recordación. Llega el tiempo en que se sienta que la presencia del Espíritu de Dios rige esta tierra, que al mal le decimos ¡Ya está bueno! Vete de aquí porque el lugar que pisamos, santo es.

Bendecimos al Magdalena, a la Costa Caribe, a Colombia. Estamos llamados a bendecir, y eso ejercemos en la tierra donde Él nos colocó, porque atalayas suyas somos.

Nos conocerán por el mover espiritual, ya no dentro de cuatro paredes, sino en pueblos y ciudades, donde Él transformará lo que estaba muerto en vida, en prosperidad y salvación. No en vano somos I.C.B.N., guerreros del Reino de los Cielos, voceros de las Buenas Nuevas de Salvación, portadores de la gracia y el favor de Dios.

¡YA ESTÁ BUENO, PARA QUE AQUÍ VUELVA A REINAR DIOS!

Edgardo Pabón Miranda