REYES Y REINOS III
“Y la ira de Jehová se encendió contra Israel, y los vendió en manos de Cusan-risataim rey de Mesopotamia; y sirvieron los hijos de Israel a Cusan-risataim ocho años. Entonces clamaron los hijos de Israel a Jehová; y Jehová levantó un libertador a los hijos de Israel y los libró; esto es, a Otoniel hijo de Cenaz, hermano menor de Caleb. Y el Espíritu de Jehová vino sobre él, y juzgó a Israel, y salió a batalla, y Jehová entregó en su mano a Cusan-risataim rey de Siria, y prevaleció su mano contra Cusan-risataim”. Jueces 3:8-10
“Y clamaron los hijos de Israel a Jehová; y Jehová les levantó un libertador, a Aod hijo de Gera, benjamita, el cual era zurdo.” Jueces 3:15
“Entonces los hijos de Israel clamaron a Jehová, porque aquel tenía novecientos carros herrados, y había oprimido con crueldad a los hijos de Israel por veinte años. Gobernaba en aquel tiempo a Israel una mujer, Débora, profetisa, mujer de Lapidot. Y ella envió a llamar a Barac hijo de Abinoam, de Cedes de Neftalí, y le dijo: ¿No te ha mandado Jehová Dios de Israel, diciendo: Ve, junta a tu gente en el monte de Tabor, y toma contigo diez mil hombres de la tribu de Neftalí y de la tribu de Zabulón;” Jueces 4:2-4,6
Tres versículos para descubrir el patrón: clamaron , y tatatá… así por 13 de los 21 capítulos del libro de los Jueces. Es decir el pueblo clamaba, Dios enviaba un profeta que los confrontaba, para llevarlos a arrepentimiento y a entender porque vivían lo que vivían. A entender que su desobediencia, se les convertía en un tropezadero, trampa y puerta de entrada para sus enemigos. Por lo cual, eran sometidos, dilapidadas sus cosechas y robado su ganado, por ende Israel empobrecía. Pero entonces, venía respuesta de Dios, quien se apiadaba de ellos y les rescataba a través de un libertador.
¿Cuál es el punto aquí? Todo lo que ocurre tiene una razón, un por qué; las situaciones no salen de la nada. Pero Dios, quien es superior sobre todas las cosas, tiene propósito; quiere darnos vida, salud, bendición. Todo esto se consigue a través de un corazón que se vuelve a Él genuinamente, que le conoce en medio de sus circunstancias, que entiende que no nos deja, ni nos abandona, que es Padre.
La clave mostrada aquí, es la oración. El pueblo clamaba, buscaba la misericordia de Dios, el perdón y salvación de sus circunstancias y obtenía su favor y misericordia. Pero. a veces como nación, estamos esperando que nos solucionen todo ; y en lugar de poner nuestra mirada en lo alto, la ponemos en las cosas de abajo, en simples mortales que no pueden hacer mucho por sí mismos. Estos hombres, estos jueces, fueron instrumento en manos de Dios. Pero no eran ellos, era Dios quien les procuraba las victorias, dándoles las estrategias.
Por lo tanto, hemos de recordar que es a través del clamor, de la oración que vienen las respuestas; por eso Pablo escribió a Timoteo: “Exhorto ante todo, a que se hagan rogativas, oraciones, peticiones y acciones de gracias, por todos los hombres; por los reyes y por todos los que están en eminencia, para que vivamos quieta y reposadamente en toda piedad y honestidad. Porque esto es bueno y agradable delante de Dios nuestro Salvador”. 1 Timoteo 2:1-3
“Quiero, pues, que los hombres oren en todo lugar, levantando manos santas, sin ira ni contienda”. 1 Timoteo 2:8
La respuesta está en una oración, con la actitud correcta.
Bendiciones,
Rocío Salas Ariza
Amén 🙌🙌
Amén. A ti oramos y clamamos oh Dios , por los que nos gobiernan.
Amennnnn orar en todo tiempo