PARECER O SER
“Hay caminos que al hombre le parecen rectos, pero que acaban por ser caminos de muerte.” Proverbios 14:12
Es común hoy en día escuchar la pregunta: “¿Te parece?”.
Esta pregunta la encontramos haciendo parte del léxico cotidiano en casi todos los contextos en los que el hombre se relaciona, por no decir que en todos. Ella traduce: “¿estás de acuerdo, o no, con esto o aquello?”; y tiene un trasfondo más profundo de lo que a simple vista se puede percibir.
Cuando alguien dice: “esto me parece, o esto no parece”, está expresando en tres palabras la sumatoria de lo que hay en su espíritu y alma (esta última, conformada por las emociones, mente y voluntad). Es decir que es una afirmación o un interrogante a través del cual se conoce lo que hay en la esencia del ser. Algo común en casi todas las respuestas o afirmaciones que da una persona; pues la mayoría de las veces se afirma o se responde acorde a lo que se es, se tiene o piensa. Sin embargo, no es lo mismo que algo PAREZCA y NO SEA, a que algo SEA y NO PAREZCA. Y es exactamente en esta coyuntura, donde nuestra dependencia a Dios es la clave.
“PARECER” Y “SER” son dos palabras que lo único que tienen en común son las letras E y R: la terminación ¨ER¨; por consiguiente, ten mucho cuidado a la hora de tomar decisiones en las que estén estas dos palabras entrelazadas. Recuerda que, “no todo lo que parece SER, es; y no todo lo que ES, PARECE.
La clave está en ir a Cristo, quien quita las apariencias, y deja solamente, lo que es.
Que en este día, el Señor te de la sabiduría para permanecer en Él, quien es el camino correcto y seguro.
“Yo soy el camino, la verdad y la vida —le contestó Jesús—. Nadie llega al Padre sino por mí" Juan 14:6.
Anhelo que hoy puedas entender y conocer lo que ERES en Él.
Con Amor, Natalia Andrea
Amén y amén. Hermoso mensaje.