Jesús mi mejor maestro

JESÚS, MI MEJOR MAESTRO

Vosotros me llamáis Maestro, y Señor; y decís bien, porque lo soy.
Pues si yo, el Señor y el Maestro, he lavado vuestros pies, vosotros también debéis lavaros los pies los unos a los otros. Porque ejemplo os he dado, para que como yo os he hecho, vosotros también hagáis. Juan 13:13-15


Este pasaje como muchos otros ,nos enseña acerca de Jesús como maestro,;pero hoy, vengo a decirte que Jesús no es solo un maestro, sino EL MEJOR MAESTRO. Mientras estuvo en la tierra como hombre, se dedicó a enseñarnos. Sus enseñanzas iban encaminadas siempre, a que cuando Él se fuera, cuando Él faltara y se cumplieran las escrituras, sus discípulos supieran como hablar, pensar y actuar, de acuerdo a la voluntad del Padre; siendo así, fieles discípulos de Él.


Tal vez pensarás que para Él era fácil actuar como lo hacía, basándote en que Él es 100% divino. Hoy te digo: no fue fácil para Él vivir todo lo que vivió. Así como fue 100% divino, también fue 100% humano; es decir, Él era como tú y como yo: sufría, sentía, se enojaba. La diferencia era que Él no cedía ante sus emociones. Eso es lo que debemos aprender de la vida del mejor Maestro, de mi Maestro: Jesús.


En cada momento de su vida, Él nos dejó excelentes enseñanzas que estamos llamados a imitar como sus discípulos. Nos dio ejemplo de amor al entregarse por nosotros en la cruz, de paciencia, templanza, dominio propio, bondad, gozo, fe, mansedumbre; pero más que cualquier otra cosa, nos enseñó HUMILDAD (léelo en Filipenses Cap. 2).


Imitemos al mejor maestro: Jesús de Nazareth.
                                                                       
Te bendigo , Pierina González Vargas, Pastora