No me desampares, oh Jehová; Dios mío, no te alejes de mí.Apresúrate a ayudarme, Oh Señor, mi salvación.Salmos 38:21-22
El salmist plasmó su condición, porque él sabía de onde venía su rescate.David, un hombre que Dios amó incondicionalmente sin importar sus pecados.Él le decía al Padre como se sentía y por lo que estaba pasando,esperaba, adoraba, clamaba, gemía, también pedía;pero más allá de todo esto, el varón creía. Era un hombre de fe, aunque sentía temor también; pero aun así, no dejó de creer en su Ayudador.
Batalló con gigantes físicos y espirituales, y al final la victoria le era dada. David, tenía algo muy lindo, y era que buscaba la ayuda del único que realmente podía darle salvación y protección.
Hoy quiero declarar sobre tu vida, que Jehová llega a tu rescate; que cuando le busques, lo que te está oprimiendo, huirá en el nombre de Jesús. La salvación y protección llegan a tu vida y familia, ¡créelo!
Dios te guarde, Dios te bendiga.
Disley sierra
Amén. Él es mi pronto socorro.
Amén amén 🙌🙌🙌🙌