El aborto

El aborto  es la interrupción o finalización del embarazo de forma prematura. Si se toman medidas para terminarlo, se denomina aborto inducido; si sucede de forma natural, se llama aborto espontáneo, o aborto inducidsi si durante las primeras 21 semanas, decides terminarlo, o sucede algo imprevisto, es considerado ABORTO.  Te hago una pregunta : ¿Has abortado alguna vez? Yo si!  

Hemos crecido sabiendo que abortar no hace parte de los planes de Dios.  Pero hoy, no te hablo de abortar un feto, te hablo de abortar los propósitos de Dios para nuestra vida, tanto en la vida espiritual, como en la vida secular, interrumpiendo el proceso de maduración adecuado.  Hablo de abortar los planes que teníamos. simplemente porque no tuvimos la paciencia de esperar; porque somos impacientes e inmediatistas, y queremos todo “ya y ahora”. También, lo hacemos cuando iniciamos un proyecto o negocio y desistimos antes de ver los frutos.

Durante el embarazo sucede un proceso de maduración del feto durante los 9 meses, mientras cada parte de su ser será formada y madurada para poder nacer; de lo contrario morirá, pues sus órganos no están completos ni preparados anatómica, ni fisiológicamente para sobrevivir. Eso también sucede en nuestras vidas: si nos salimos del proceso antes de tiempo, saldremos debiluchos y no estaremos preparados para llevar a cabo los planes que Dios tiene para nosotros, y es posible que no sobrevivamos. La vida espiritual también exige un tiempo. Dios nos está preparando para cosas mayores y mejores:

A eso se refieren las Escrituras cuando dicen: “Ningún ojo ha visto, ningún oído ha escuchado, ninguna mente ha imaginado lo que Dios tiene preparado para quienes lo aman”. 1 Cor 2:9 (NTV)

¿Cuántas veces hemos abortado?, ¿qué hemos abortado? Solo tú sabrás decirle al Padre y pedirle perdón, porque dejaste todo tirado a mitad de camino, mientras Él nos instruye a hacer lo contrario, ya que la prueba de su fe, produce constancia (Santiago 1:3). Seamos persistentes y no más fluctuantes como las olas del mar.  

¡Insistir , persistir y no desistir! Luchemos hasta el final, continuemos hasta ver lo que Dios va a hacer con cada uno de nosotros.

Hoy decido, no abortar más. ¿Y tú?

Claudette Saade