¿DÓNDE ESTÁ TU TESORO?
“No os hagáis tesoros en la tierra, donde la polilla y el orín corrompen, y donde ladrones minan y hurtan; sino haceos tesoros en el cielo, donde ni la polilla ni el orín corrompen, y donde ladrones no minan ni hurtan. Porque donde esté vuestro tesoro, allí estará también vuestro corazón.” Mateo 6:19-21
La palabra del Señor hoy te dice, que donde esté tu tesoro, está tu corazón. Entiendo que este corazón hace referencia a un corazón espiritual, que es aquel donde está tu espíritu y tu alma.
Hoy hay una pregunta para ti … ¿sabes dónde está tu corazón? O, en otras palabras, ¿sabes qué atesora tu espíritu y tu alma? Quizá no sepas la respuesta, pero te pueden ayudar a responderla los siguientes versículos.
“Porque el deseo de la carne es contra el Espíritu, y el del Espíritu es contra la carne; y estos se oponen entre sí, para que no hagáis lo que quisiereis. Pero si sois guiados por el Espíritu, no estáis bajo la ley. Y manifiestas son las obras de la carne, que son: adulterio, fornicación, inmundicia, lascivia, idolatría, hechicerías, enemistades, pleitos, celos, iras, contiendas, disensiones, herejías, envidias, homicidios, borracheras, orgías, y cosas semejantes a estas; acerca de las cuales os amonesto, como ya os lo he dicho antes, que los que practican tales cosas no heredarán el reino de Dios. Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay ley". Gálatas 5: 17-23
Dicho esto, sería importante que identificaras cuál de las características mencionadas anteriormente tienes en mayor proporción; aquellas propias de la carne, que es lo que atesoras en la tierra, o aquellas propias del espíritu, que son las que atesoras para el cielo.
Dios hoy quiere que cultives tesoros en el cielo; quiere que tu corazón lo atesore eternamente. Él quiere que tu tesoro esté donde Él está. Por esto, si sientes que en este momento Él no es tu verdadero tesoro, no te preocupes; confiésaselo, y Él con su amor eterno te guiará día a día hacia el que es el mejor y más grande tesoro.
Con amor, Natalia Torres
Amen
Depende de la REVELACIÓN que recibamos de Dios sobre Él.
Todos llegamos a los pies del Señor buscando solución para algo que estamos pasando, pero al final, a quien encontramos es al verdadero Tesoro.
Sin embargo, creemos mimetizarnos para obtener de Él, nos sacie de tesoros temporales, haciéndole pensar que vamos tras los del cielo, pero en realidad nos mueven los terrenales, gran error, salgamos de eso, podemos engañar a cualquiera inclusive a nosotros mismos, pero nunca a Dios.
La clave nos la da en Mateo 6; si Él es nuestro Tesoro, lo demás (llámese como se llame) llegará. Busquemoslo a Él, que es el Tesoro que perdura por siempre, sin dejar de darte lo .