Deja el afán

Hechos3:1-10https://www.biblegateway.com/passage/?search=Hechos%203&version=RVR1960

Pedro y Juan subían juntos al templo a la hora novena, la de la oración. Y era traído un hombre cojo de nacimiento, a quien ponían cada día a la puerta del templo que se llama la Hermosa, para que pidiese limosna de los que entraban en el templo. Este, cuando vio a Pedro y a Juan que iban a entrar en el templo, les rogaba que le diesen limosna. Pedro, con Juan, fijando en él los ojos, le dijo: Míranos. Entonces él les estuvo atento, esperando recibir de ellos algo. Mas Pedro dijo: No tengo plata ni oro, pero lo que tengo te doy; en el nombre de Jesucristo de Nazaret, levántate y anda. Y tomándole por la mano derecha le levantó; y al momento se le afirmaron los pies y tobillos; y saltando, se puso en pie y anduvo; y entró con ellos en el templo, andando, y saltando, y alabando a Dios. Y todo el pueblo le vio andar y alabar a Dios. Y le reconocían que era el que se sentaba a pedir limosna a la puerta del templo, la Hermosa; y se llenaron de asombro y espanto por lo que le había sucedido.

¿Qué puedes dar hoy ?

A veces, tenemos tanto para dar y no lo hacemos, porque solo miramos nuestra condición o lo que estamos viviendo; pensamos que todo es dinero. Pero hay muchas cosas que dar , y la mayoría de ellas no requieren dinero; una de ellas es ORAR por alguien que esté atravesando una situación difícil o una enfermedad. No importa cuál sea su dificultad, tú puedes detenerte un momento y dejar atrás el afán de tu vida diaria para orar por esa persona. Así como dijo Pedro ese día al cojo: "no tengo plata ni oro, pero lo que tengo te doy, en el nombre de Jesús, levántate y anda".

Tú puedes ser esa persona. Hoy tú te puedes convertir en un Pedro que le diga a alguien: “levántate y anda, porque en mi vida reposa el poder de Dios, y en el nombre de Jesús tengo la autoridad para decirte que estás sano, libre y bendecido”.

Pero algo debes tener claro, y es que no lo harás para que hablen diciendo que tú lo hiciste. Nunca olvides que toda la gloria es para el Señor nuestro Dios. A Él la gloria por siempre.

Levántate y deja el afán en tu vida, conviértete en un Pedro hoy y ayuda a alguien.

Katherine Rodríguez, Pastora y profeta.