AMA CON PROPÓSITO
"Jehová se manifestó a mí hace ya mucho tiempo, diciendo: Con amor eterno te he amado; por tanto, te prolongué mi misericordia".Jeremías 31:3
El amor, más que un sentimiento es una decisión. El mejor ejemplo está en la Biblia: “Porque De tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito” Juan 3:16. El verbo “DAR”, significa: una acción ejecutada previa a una decisión tomada. La decisión ha sido siempre amar, y esto lo hizo desde antes de la fundación del mundo, cuando aún nosotros no habíamos nacido. Él nos conoció y nos dio forma con sus manos, nacimos del corazón del Padre sin tener en cuenta las veces que lo negaríamos y que lo ignoraríamos. Todo esto me demuestra su amor por mí. Amor que veo reflejado en la creación, en la naturaleza, en el canto de un pajarito. Aún en los detalles que decimos ser pequeños, Él nos demuestra su amor.
¿Existe un límite para amarlo, aunque no lo podamos ver?¡ Sí lo podemos ver! Lo vemos en la calle, en el rostro de nuestro prójimo, en los más necesitados. Busca la mirada de las personas e identifica una necesidad, ahí está Dios mostrando de qué carece esa persona, para darnos la oportunidad de aportar a su necesidad. El maestro dijo: “Tuve hambre y no me diste de comer, estuve desnudo y no me vestiste, estuve preso y no me visitaste y los discípulos le dijeron: Señor nos tienes necesidad, a ti no te hace falta nada, eres el dueño del mundo, del oro y la plata. Y Él nos respondió: El que haga esto a uno de mis pequeños a mí me lo hace”.
¿Por qué limitamos el amor de Dios para con nuestro prójimo, con los pequeños? ¿Hacemos algo más allá de lo normal, si amamos a los que nos aman? ¿Cuánta determinación hay en nuestro corazón de querer ayudar o sembrar sin interés? Todo lo que hagamos debe ser para Dios, y no para los hombres. De Él viene nuestra recompensa.
Con humildad podemos pedirle al Padre que haga memoria de lo bueno, y nos exima de lo malo, porque delante de Él nadie se puede justificar. Para Él no existe límite de amor. Pidámosle que nos diga en qué tierra debemos sembrar, y estemos dispuestos a dar lo que Él nos pida.
Te Amo ICBN.
Amemos con propósito
Elías Ariza
Amén
¡Dios es amor! Lo que hagamos para Él, lo hacemos por lo que él es. Cuando obramos para obtener recompensa de las personas, no lo hacemos motivados por Dios, sino por interés particulares que desarrollamos bajo la apariencia de hijos Suyos. Examinemos la definición de amor de 1 Corintios 13: 4-8, nada tiene que ver con el concepto del sentimiento que nos enseñó el mundo.
Ameeeeen amén
Amennn q hermoso el amor de Dios en el corazon
Amén. Enseñanos más Padre, a amar como tú lo haces, a amar con propósito.