ABBA PADRE
En este día, quiero compartir esta palabra que ha venido confrontando mi espíritu. Escrito está en Salmos 27:1 :
“Jehová es mi luz y mi salvación; ¿de quién temeré? Jehová es la fortaleza de mi vida; ¿de quién he de atemorizarme?”
Hoy, quiero decirte que, cuando Jesús viene como esa luz que alumbra nuestra vida y nuestro caminar, Él se lleva toda oscuridad que hay en ti y en mí, porque ha venido a dar luz a todo lo que estaba oscuro en nuestra vida.
Se lleva toda oscuridad -trae luz.
Quita toda ruina y escasez- trae prosperidad.
Se lleva el lamento- nos regala gozo.
Disipa toda tormenta – llega la calma.
Quita todo desespero- nos inunda de paz.
Eso es lo que Jesús quiere traer a nosotros; pero de ti y de mi depende si lo tomamos, o simplemente dejamos que el enemigo venga a amedrantar nuestras vidas; y lo digo porque muchas veces en nuestro diario a vivir nos suceden tantas cosas como por ejemplo: nos cortan los servicios públicos, tenemos una deuda, la vecina se afecta porque arreglas tu casa, y aparecen muchos problemas más. En fin son tantas cosas que el enemigo utiliza para atemorizarnos y tratar de robarnos la paz, pues esa es su especialidad.
Pero eso no es lo que quiere Abba para nuestras vidas, Él quiere que cuando estemos viviendo cualquier circunstancia o problema, lo busquemos, pues Él tiene su oído presto a cada una de nuestras oraciones para así poder fortalecernos, y llevarse todo lo que aflige nuestro corazón.
La palabra dice: “el perfecto amor de Dios echa fuera el temor”. ¿Cómo lo obtenemos? Hablando con Él sin miedos ni tapujos, porque Él es una persona que nos escucha, nos responde en el momento menos esperado, porque nos ama con amor eterno y nos abraza como ese Padre que nunca tuvimos, o quizá lo tuviste, pero fue como si nunca lo hubieses tenido porque era un padre ausente.
Por eso, hoy te digo : ve, corre a sus brazos, para que Abba Padre te arrulle y te guarde en sus manos como a la "niña de sus ojos".
Amén. Te bendigo.
Nidis Moreno
Amén, hermoso devocional
Aleluya
ABBA PADRE, ese que nunca nos abandona y que siempre tiene los brazos abiertos para nosotros. Que bonito devocional Nidis..Dios te siga bendiciendo e inspirando a escribir para muchos..
En los brazos del padre encontramos un amor sin límites, gozo y paz. Amén
Amen Amen Abba Padre!