A la manera de Dios siempre es mejor

                      A LA MANERA DE DIOS SIEMPRE ES MEJOR

1 Juan 1:9 dice : “Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad.”

Así como dice 1 Juan 1:9 : “ si confesamos nuestros pecados, él nos limpia”. Debemos reconocer quiénes somos y  lo que hay en nosotros, en nuestro interior , así Él se encargará de ayudarnos en nuestra debilidad, y de limpiar la maldad que desde el principio de los tiempos ha morado en nosotros. 

No se trata solamente de reconocer el problema, debemos ser diligentes y buscar la solución, pero siempre guiados por el Espíritu Santo, el Ayudador, el Consolador, el que nos guía. 

El Espíritu Santo, ese que nos dejó Jesús cuando se fue, es quien puede ayudarnos; pero nosotros tenemos que seguir las instrucciones que nos da, para que podamos ser limpiados de todo aquello que nos impide  avanzar hacia nuestro destino profético , y ver cumplidas esas promesas que hemos recibido.

Es tiempo de someternos a la Palabra, a la verdad, para resistir al diablo y hacerlo que huya de nosotros y de todo lo que tiene nuestros nombres y apellidos. 

Cuando somos obedientes, no tenemos que pelear, pues Dios se encarga de hacerlo por nosotros.
  

Oremos al Padre, para que nuestro espíritu sea alineado a lo que él quiere para nosotros a través de la obediencia y sujeción,  y a través de la guía del Espíritu Santo cada día de nuestra vida; y así, ser  totalmente limpios para proseguir a la meta… Porque a la manera de Dios, siempre es mejor. 


Bendiciones. Pierina González, Pastora.